Archivo del Autor: lucasberone

66. Las vidas de los superhéroes: modelos de identidad en el corazón del Imperio / Lucas Berone

Resumen

El mito heroico, sobre el que se modelan las modernas narraciones de superhéroes, es una matriz de relatos biográficos que acompaña y narra las transformaciones de la sociedad humana, se podría decir, casi desde el principio de su historia. Por otra parte, desde el punto de vista de sus características genéricas, las biografías heroicas constituyen un punto de cruce entre lo público y lo privado; o más bien involucran, como una de sus propiedades singulares, el problema de la identidad y sus dimensiones. El propósito del presente trabajo, entonces, será analizar los cambios producidos en la configuración de diversas identidades superheroicas a lo largo del siglo XX y principios del siglo XXI, en tanto índices o “síntomas” que atestiguan o articulan un conjunto significativo de procesos y cuestiones sociales más generales, en el marco del mundo contemporáneo.

Publicado en Revista Cuadernos del Sur, núm. 39 (diciembre de 2011), pp. 23-40. Departamento de Humanidades, Universidad Nacional del Sur, Bahía Blanca. ISSN 1668-7426

Leer artículo completo: Las vidas de los superhéroes

64. Historias mínimas. Los caminos de la ciencia ficción en la historieta argentina contemporánea / Lucas Berone

Resumen: El presente trabajo parte de la distinción entre mundos ficcionales realistas y mundos ficcionales fantásticos; y presenta y aborda contrastivamente, luego, un corpus de historietas de ciencia ficción recientemente producidas y publicadas en Argentina, a partir de dos ejes de análisis (las formas de la imaginación acerca de los vínculos entre el hombre y la tecnología y la construcción narrativa de sociedades utópicas o futuras), preguntándose fundamentalmente por las posibilidades que tienen dichas historietas de significar lo nuevo en el seno de una cultura periférica de Occidente.

Ver texto completo: berone-alambique

El artículo fue inicialmente publicado en Alambique: Revista académica de ciencia ficción y fantasía, Vol. 2; Iss. 1. Link: http://scholarcommons.usf.edu/cgi/viewcontent.cgi?article=1037&context=alambique.

59. Destino y carácter en la historieta Watami, de Oesterheld y Moliterni / Lucas Berone

Resumen: Los géneros de la aventura con los que trabajaba Héctor Oesterheld ­­lo obligaron a ficcionar repetidas veces una distancia cultural. Especialmente el western: género que pone en escena un diálogo entre culturas distantes, o mejor, un encuentro violento entre mundos o universos dispares. En nuestro país, la serie Watami, de Oesterheld y Moliterni, planteó por primera vez el desafío de reconstruir el mundo desde la perspectiva original del indígena americano: se trata así de una ficción que intenta pensar la “diferencia”, y colocarla en su lugar. La pregunta a hacer sería, pues: ¿cuál es la clave de esa diferencia, puesta en narración? La hipótesis que defiendo es que dicha “diferencia” pasa por una dimensión central en la narrativa de aventuras, a saber: una cierta representación de la vida humana. Desde este punto de vista, la revisión benjaminiana de los conceptos de destino y carácter debe ponerse frente al universo estético de Oesterheld, como clave de acceso fundamental.

Ver texto completo: ArtículoAfuera(Berone)

Artículo publicado originalmente en la revista digital Afuera. Estudios de Crítica Cultural (www.revistaafuera.com), año VI, Número 10, de mayo de 2011.

 

58. Del «Diario del Che» a la historieta del hombre nuevo / Lucas Berone

Resumen:
El Diario del Che en Bolivia constituye una de las escrituras del yo más curiosas que tenemos: en tanto diario de guerra, y además inconcluso, instala en recepción la necesidad de trabajar incesantemente con lo no-dicho, de llevar las palabras del “yo” a otro plano de resonancia. Un año después, en 1968, Héctor G. Oesterheld y Alberto y Enrique Breccia retomaron la palabra y la figura del Che para hacer una historieta; y esta palabra, en esa historieta, obligó al relato a escindirse en dos voces, por lo menos. En ese momento, el gesto valiente de Oesterheld y los Breccia inauguraba todo un espacio de problemas en el campo de la literatura popular; porque asumir repentinamente un nuevo estatuto estético y político resquebrajó la lisa superficie narrativa de la historieta de aventuras argentina (género que hasta los sesenta sólo había sido definido culturalmente por el concepto de “entretención”, y acaso por una vaga idea de “formación”) y la llevó a ejecutar torsiones inesperadas en el plano de la enunciación, al tiempo que se incorporaban a su discurso materiales semánticos inéditos: el Che, Eva Perón, el imperialismo, el pop y la modernización de las costumbres, un “presente de lucha”.
Ver texto completo: berone_acta

Ponencia leìda en el Coloquio Internacional «Escrituras del yo», organizado por la Facultad de Humanidades y Artes de la Universidad Nacional de Rosario, entre el 18 y 20 de agosto de 2010.

57. H. G. Oesterheld, narrador de la última experiencia / Lucas Berone

Resumen:
Puede decirse, retomando algunas categorías de Walter Benjamin, que H. G. Oesterheld constituye, dentro del campo de la literatura popular, uno de los últimos narradores de la experiencia, o bien, uno de los «narradores de la última experiencia»: la de la modernidad. En su extensa obra, especialmente en sus relatos e historietas de ciencia-ficción, la muerte aparece como un acontecimiento crucial, conclusivo y dador de sentido. Sin embargo, y acerca del mismo corpus, es posible señalar la recurrencia de una experiencia-límite, una última experiencia de la muerte, que marca la crisis de todo lenguaje de la narración: la catástrofe nuclear.
Ver artículo completo: HF_8_10_pag_87_98

Publicado originalmente en la revista El Hilo de la fábula, Revista anual del Centro de Estudios Comparados, Nº 10. Santa Fe: Ediciones UNL, 2010; pp. 87-98.

47. «Arte, culpa y femineidad, en clave masottiana» / Lucas Berone

Abstract: «La primera parte de esta presentación se ocupará del happening masottiano, esto es, del happening tal como lo concibió y lo practicó Masotta hacia 1966 y 1967. Pero, enseguida tengo que decir que, hacia el final de esta ponencia, iremos ingresando a otro campo, el de la historieta, para ocuparnos de sus rasgos peculiares en tanto lenguaje mediático y discurso social. Ahora bien, claro que habría agregar, casi al mismo tiempo, que estrictamente hablando esta disposición de reflexiones y de argumentos no debería sorprender a nadie (por lo menos, a nadie que conozca o haya estudiado la obra de Masotta). Ir del happening (y del arte pop) a las historietas es ejercer los mismos tipos de cruces y pasajes que se planteó la producción masottiana, poniendo en cuestión, especialmente, la separación entre cultura de élites y cultura de masas

Presentación leída en la mesa «Oscar Masotta: el psicoanálisis, las vanguardias y la historieta», en la Feria del Libro de Córdoba, el 11 de septiembre de 2009. Una versión más breve de este texto, que no incluye el fragmento dedicado al artículo de Masotta sobre Crepax, fue publicada en la revista Exordio, año 2, núm. 2 (CIEC, Córdoba, octubre de 2010), pp. 69-73.

Ver texto completo: Masotta-FeriadelLibro2009(Berone)

41. Imágenes de la ciudad y alegorías de lo «propio» en la historieta nacional / Lucas Berone

Abstract: A veces, para ver ciertas cosas en su correcta figura, hace falta dar un paso atrás y aprender a tomar distancia. Precisamente de este procedimiento, del distanciamiento como modo de apropiarse de las cosas y las ciudades, como espacio de enunciación de una forma de ciudadanía, como forma y como contenido de la alegoría, voy a hablarles en el presente ensayo. En la clásica historieta El eternauta (1957-1959), una nevada mortal interrumpe los relatos característicos de la ciudad (Buenos Aires) y los espacios de ciertos ejercicios de la ciudadanía moderna (el Estadio Monumental, la Plaza Italia) pasan a ser zonas de combate, en función de una lógica militar que los lee como objetivos. De este modo, Buenos Aires (una ciudad muerta, saturada de muertos) se alegoriza y se hace ruina: Oesterheld y Solano López construyen una mirada alegórica sobre su propia cotidianeidad y la de su Lector. Y esta mirada anormal, distanciada, problematiza profundamente la ideología que sostiene las representaciones tradicionales de lo propio. En este nuevo tipo de representación de la ciudad, la nítida separación entre lo propio y lo ajeno ya no tiene lugar: lo familiar aparece ahora como ajeno y extraño.

Ver texto completo:

Una versión más breve fue presentada como ponencia en el Congreso Internacional «Ciudades Latinoamericanas», organizado por la Fac. de Filosofía y Letras de la UBA y la Biblioteca del Congreso de la Nación y realizado el 11 y 12 de noviembre de 2009 en Buenos Aires.

Buenos Aires era una ruina(Berone)

38. Las pesadillas de H. G. Oesterheld: constitución de una mirada oblicua / Lucas Berone

Resumen: Héctor G. Oesterheld es el otro de la literatura argentina. Enfrentado a la disyuntiva entre literatura y mercado, optó inequívocamente por escribir desde las restricciones impuestas por el segundo. Sin embargo, desde este lugar, trabajando con los materiales de la ciencia ficción (procedimientos, temas, motivos), construyó lo que podría denominarse como una mirada oblicua sobre lo real: mirada que se ejercita en la creación de mundos ficcionales, pero que es, siempre, una mirada vuelta hacia la historia y hacia la sociedad que la engendra. Entre 1957 y 1977, Oesterheld escribió sus pesadillas sobre el presente: la serie de las invasiones alienígenas a Buenos Aires. Nos interesará recorrer el itinerario definido por dichas ficciones a partir de la configuración de tres núcleos temáticos fundamentales, que giran en torno al problema de la representación del otro (el alienígena): el sentido del conflicto, el lugar del poder y las formas de la dominación.

Ver texto completo: LaspesadillasdeOesterheld

Artículo publicado en Rev. Semiosis ilimitada, núm. 1, pp. 230-246. UNPA, Río Gallegos, 2002.

36. Entrevista a Oscar Steimberg: «Lo que tiene de bueno la historieta es que es imposible»/ Lucas Berone y Federico Reggiani

Texto completo: EntrevistaaOscarSteimberg_versiónfinal

«La elección de la historieta como objeto estaba directamente relacionada con la producción intelectual de un grupo, relacionado o nucleado en torno al Instituto Di Tella, a fines de los años sesenta. Por supuesto, no era únicamente el momento del Di Tella: era también el momento del pop y del camp. (…) Entonces, valorar la historieta se podía considerar en continuidad con la valoración del arte pop y del camp. O mejor dicho, en continuidad con la valoración que las perspectivas pop y camp hacían de las artes populares y comerciales: de las revistas femeninas ‘de último nivel’, de la publicidad, de la historieta más ‘barata’ o con peor soporte gráfico, etc.» (…)

«Y eran los tiempos en que se empezaba a pensar en la ‘muerte del autor’. Tal como sucedió en Literal, todos habíamos tenido, o teníamos en ese momento la idea de una revista sin especificación de autor, la idea de un ‘autor común’. Y eso se trasladaba, o venía de, esta valoración de los géneros ‘bajos’: la cuestión de que el arte de este tiempo, del tiempo que estás viviendo, puede estar en cualquier lado. No lo decíamos así, pero podríamos haberlo dicho: que en cualquier lado está la experiencia estética.» (…)

«Con Patoruzú, yo había tenido una suerte de ‘fantasía’, cuando me di cuenta de lo que era, con ayuda de esas nuevas perspectivas, con ayuda de esa bibliografía que te permitía ver la complejidad en la simplicidad. Que te permitía descubrir que, en realidad, Superman era infinito, que era tan infinito como la Gioconda, ¿no? Por un lado, Patoruzú era una historieta que yo había recorrido desde la infancia, ampliamente; sobre la que había pensado algo, también, porque era como una especie de parte del contexto de la cultura tradicional argentina, no de la cultura ‘elevada’, pero sí tradicional. Por otro lado, analizar Patoruzú me permitía ejercer un trabajo crítico inmediatamente político. Y en ese momento, había una esperanza de la eficacia política de la crítica, que exigía la permanencia y la centralidad de ese componente en la perspectiva.» (…)

 

Una versión más reducida de esta entrevista se publicó en el Nº 3 de la revista Árbol de Jítara (Córdoba, mayo de 2009), pp. 56-61.

33. Memoria y figuraciones del futuro: las continuaciones de El Eternauta, de H. G. Oesterheld / Lucas Berone

Ponencia presentada al VII Congreso Internacional Orbis Tertius de Teoría y Crítica Literaria. Universidad Nacional de La Plata. Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación.

Publicada en:

ACTAS del VII Congreso Internacional Orbis Tertius de Teoría y Crítica Literaria
Dirección: José Amícola / Coordinación: Malena Botto / Integrantes: Virginia Bonatto, Julieta Dal Bello, Ignacio Lucía, Mariela Sánchez / Edición de la página web: Sergio Pastormerlo
La Plata, Orbis Tertius, noviembre de 2009. ISSN. 1851-7811
Resumen: Siempre me interesaron las relaciones entre la Primera Parte de El Eternauta, de Héctor Oesterheld y Solano López (1957), y sus “malogradas” continuaciones. Por su carácter fantástico, el argumento de la historieta admite la posibilidad de múltiples continuaciones y derivaciones; sin embargo –y la Segunda Parte de la obra (escrita por el mismo Oesterheld en 1976) es una buena prueba al respecto–, la realización efectiva de una continuación planteó y plantea innumerables dificultades. En este punto, creo que la clave para pensar el problema pasa por la cuestión de la “memoria” y el lugar del “futuro” en la ficción. Muchos olvidan que, en el final de esa Primera Parte, la intriga se hace circular: para recuperar vida y hogar, el héroe olvida o anula su experiencia aventurera. La recuperación del pasado está basada en el olvido del futuro, que necesaria y trágicamente va a ser catastrófico. En cambio, y este es el gran acierto poético, junto al héroe está su autor, el “guionista”, cuya escritura sí se orienta hacia el futuro (¿podrá evitar la catástrofe publicando todo lo que el héroe le contó: “será posible”?). Para continuar su historia, Juan Salvo tiene que recuperar la memoria de su experiencia, y en ese trance no podrá evitar dejar de ser quien es: ¿cómo continuar, entonces, la historia de un sujeto que ha dejado irremisiblemente de ser lo que era? ¿Transformándolo en un “super-hombre”? En todo caso, queda claro que El Eternauta es un texto diferente aún dentro de la producción de Oesterheld; casi no es un buen ejemplo de esa producción: contra los supuestos y protocolos de la “literatura de masas”, dicha historieta obliga al lector, empuja a la ficción (y a sus continuadores), a preguntarse por el estatuto de la memoria y su relación con el futuro.

Ver texto completo: LascontinuacionesdelEternauta